lunes, 26 de agosto de 2013

VACACIONES 2013 ( VISITA A TOLEDO)


Toledo es un municipio y ciudad de España, capital de la provincia homónima, de la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha y antigua capital de España. Además, el municipio es considerado individualmente como una comarca en la división realizada por la
 
 Diputación provincial, aunque desde un punto de vista estrictamente de geografía física la ciudad es puerta de la comarca natural de La Sagra, que tradicionalmente se ha considerado que comenzaba en la propia puerta de Bisagra.
 
Toledo es conocida como «La ciudad Imperial» por haber sido la sede principal de la corte de Carlos I y también como «la ciudad de las tres culturas», por haber estado poblada durante siglos por cristianos, judíos y musulmanes.


La ciudad está situada en la margen derecha del Tajo, en una colina de cien metros de altura sobre el río, el cual la ciñe por su base, formando un pronunciado meandro conocido como Torno del Tajo.
 
Tiene una configuración dispersa con barrios muy separados del núcleo principal: el de Azucaica, en la orilla derecha del río y que tiene su origen en una antigua pedanía de la 
 
ciudad, dista unos 7 km del centro de la ciudad, mientras que el de Santa María de Benquerencia, situado prácticamente enfrente del anterior en la margen izquierda del Tajo, sitúa su centro a unos 8 km del de la ciudad.

 
La historia de la ciudad de Toledo se remonta a la Edad de Bronce, continuando ininterrumpidamente hasta la actualidad, pasando por la conquista romana, el dominio musulmán y la capitalidad del reino de Castilla.

 
En el siglo XX destacaría en la Guerra Civil Española por el sitio del Alcázar y por convertirse desde 1983 en la capital de la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha

 
ORIGEN
Los primeros que estudiaron el nacimiento de la localidad, como Isidoro de Sevilla o Rodrigo Jiménez de Rada, creyeron que fue fundada por Roma, mientras otros se inclinaban por la fundación griega de manos del mitólogico Hércules e incluso por un origen hebraico. Todas estas teorías están recogidas en el Tratado de las fundaciones de las ciudades y villas
 
principales de España. Las fuentes arqueológicas ofrecen más claridad que las historiográficas. Se crearía un pequeño poblado en un vado sobre el curso medio del río Tajo, en un lugar conocido como el Cerro del Bú.

  Para el historiador local Jesús Carrobles, su posición sería estratégica en su devenir histórico,3 convirtiéndose en una fortaleza carpetana al ser un lugar de paso obligado
 
HISTORIA ANTIGUA

La ciudad es reflejada por primera vez en las fuentes históricas por Plinio el Viejo en Naturalis Historia (III) como Caput Celtiberiae.6 La llegada de los romanos a la zona fue motivada por los enfrentamientos con los cartagineses.

 
 La ciudad carpetana podría tener ya una clara jerarquización pues Tito Livio cuenta en sus Anales la captura de un rey llamado Hilerno, lo que puede ser prueba de la existencia de una monarquía o al menos de un fuerte caudillo magnificado por Tito Livio.

 
En la Edad de Bronce final, Toledo se había convertido en un gran asentamiento carpetano,7 continuando su desarrollo en la Edad del Hierro hasta llegar a ser un oppidum, plaza fuerte, con un extenso territorio en su poder.


Arqueológicamente, se conoce muy mal el poblado carpetano, aunque la dispersión de sus restos muestran su gran entidad.8 Por fuentes romanas se conoce que estaba amurallado y 


ocupaba una superficie estimada de unas 40 hectáreas. No se sabe más, aunque se puede extrapolar lo obtenido en otros yacimientos carpetanos de la misma época
 Tito Livio en Ab Urbe condita libri hace la primera mención a la conquista romana de Toledo.10 En el 193 a. C., Marco Fulvio Nobilior entabló batalla contra una coalición de carpetanos, celtíberos, vacceos y vetones en las cercanías de Toledo
 
En este primer combate solamente se capturaría al rey Hilerno. Sería un año después, en el 192 a. C. cuando se realizaría la conquista de la ciudad, convirtiéndose en una plaza fuerte romana pues aun la zona estaba dominada por los carpetanos.

 
Las campañas de Sempronio Graco en el 179 a. C. pacificarían la zona, iniciándose el proceso de romanización. Toledo sirvió a partir de ese momento como base para la conquista de la Meseta Norte.

 De la etapa republicana se desconoce casi todo salvo algunos restos arqueológicos. De ese periodo destaca la numismática, acuñandose ases de bronce con la leyenda Tole en el exergo
 
En general se daría un continuismo del modo de vida indígena, convirtiéndose en una ciudad estipendiara, es decir, que paga tributo o "stipendium" a Roma. Por otro lado, la máxima autoridad del territorio sería ya un Gobernador provincial, representante del Senado de Roma en la zona.12

 
En época augusta se iniciaría un programa monumental que la equipararía a una verdadera urbs romana.13 El exterior de la ciudad daría una imagen de "ciudad-fachada", condicionada por la topografía del lugar.

 
 En el interior, se desconoce donde se situarían el foro, las basílicas y templos, planteándose que estuvieran bajo el actual Alcázar o en la zona del Ayuntamiento.  Sí se conocen la situación del circo y el teatro (en el parque de Carmelitas), el anfiteatro (Covachuelas), acueducto y Puente de Alcántara así como la necrópolis.

 
Inscripciones de finales del siglo I y principios del siglo II demuestran la municipalidad de Toledo, al mostrar la presencia de "decuriones", figuras existentes sólo en lugares con rango de municipio.


Sobre cuándo sucedió el cambio de estamento se debaten dos posibles opciones: o bien en la época Augusta o bien en la época flavia, siendo más plausible la primera opción según los historiadores locales.
 
La principal actividad economíca era la producción agrícola, muy favorecida por las condiciones del terreno que rodeaba a la ciudad.17 18 Con la progresiva romanización habría un desarrollo del comercio a media y larga distancia.

 
En este sentido, se encuentran restos arqueológicos de importaciones a partir del siglo II a. C.. Un comercio también beneficiado por la creación de una red viaria19 que situaría a Toledo como cruce de caminos entre Emerita y Cesaraugusta por ejemplo.

 
La intensificación comercial produjo la creación de centros de producción locales de cerámicas que tendrían una importancia al menos a nivel regional.

 
Estos centros se originarían al principio del siglo I como una mezcla de tradiciones indígenas y de las cerámicas importadas. La producción de otros bienes manufacturados es peor conocida aunque ya existiría el trabajo del hierro.

 
La administración romana mantuvo la minería, practicada ya por pobladores anteriores. Concretamente se extraía cobre y plomo. La construcción también fue otro elemento económico de importancia aunque con un carácter puntual.  Así destacaría a lo largo del siglo I con grandes construcciones como el Circo romano o las infraestucturas hidráulicas.

 
La Edad Media se articula en Toledo en tres grandes etapas bien diferenciadas según el dominador. Una primera etapa, desde el siglo V hasta el siglo VIII, de dominio visigodo, que convertiría a la ciudad en la capital de su reino.

 Una segunda etapa de dominio musulmán, primero bajo el poder de los emires y califas de Córdoba para luego formar su propia taifa. La tercera etapa comenzó en el siglo XI con la conquista de la ciudad por Alfonso VI y deja a Toledo bajo el definitivo dominio cristiano
 
Desde principios del siglo V comienza la penetración de pueblos bárbaros en la península ibérica. Primero suevos, vándalos y alanos y finalmente, a partir del año 415, harían lo propio los visigodos.

 
En un primer momento se establece un reino alrededor de Tolosa, un reino creado bajo la aprobación del imperio romano de occidente.  A partir de 450 se va acentuándo la presencia de los visigodos en la península, fundamentalmente a costa de los otros pueblos bárbaros a los que se expulsa mediante expediciones militares.

 
 Esta presencia en la península se acentúa por la presión de los francos que obligan al repliegue visigodo sobre todo a partir de la batalla de Vouillé en 507.

 
A partir de ese momento se considera que el reino de Toledo sustitute al de Tolosa, manteniendo sus posesiones peninsulares y conservando además la septimania en la Galia.25

 
El establecimiento de la corte visigoda en Toledo provoca, sin embargo, muchas dificultades en el estudio de la historia de la ciudad por la falta de fuentes. Como expresa Ricardo Izquierdo, "las noticias están casi siempre referidas a la monarquía o a la Iglesia, pero no a la ciudad como tal"

 
Las principales características del periodo son por un lado la nueva influencia adquirida como capital y por otro la primacía eclesiástica expresada a través de la realización de los concilios. La nueva situación de la ciudad provoca una afluencia de población que contrasta con la decadencia anterior.

 
Además los reyes fomentarían nuevas construcciones y estaría en funcionamiento en algunos reinados una ceca para acuñar monedas. La presencia real también llevó a que se recibieran embajadas extranjeras que difundieron la ciudad en otros reinos.

 Como sede del gobierno se encontraban en la ciudad las principales instituciones visigodas, como el Oficio Palatino o el Aula Regia. De la población de la ciudad se desconoce casi todo

 aunque se supone que sería la más poblada del reino con una población servil considerable. Por otra parte habría una influyente comunidad judía que empezó a ser perseguida a partir de la conversión al catolicismo de los reyes visigodos.
 
Además de centro político, Toledo fue centro religioso sobre todo tras el abandono del arrianismo por parte de los visigodos. De hecho, la conversión al catolicismo se produjo oficialmente en el III concilio de Toledo de 589, durante el reinado de Recaredo y con la presencia setenta y dos obispos.

 


En el año 610 se convirtió en sede metropolitana, convirtiéndoso así a su obispo en arzobispo con una situación predominante sobre los demás obispos visigodos.


 
 


 Una situación que se hizo oficial en el año 681, en el XII Concilio de Toledo, remarcando la primacía del arzobispo de Toledo sobre la iglesia visigoda.

El principal exponente del poder de la Iglesia fue la celebración de los concilios, dieciocho en total, cuya celebración en Toledo acentuaba su papel como sede etropolitana

















 

 
 

Los concilios era una especie de asambleas en la que no participaban sólo eclesiásticos, estando presentes también el rey y numerosos nobles. En estas reuniones se intento fijar por ejemplo el derecho sucesorio visigodo entre otros asuntos

 
Catedral de Toledo.
 llamada también Catedral Primada de España, sede de la Archidiócesis de Toledo, es un edificio de arquitectura gótica, consideradcatedral de Santa María de Toledo, (Españao por algunos como la opera magna1 del estilo gótico en España.
 
 Su construcción comenzó en 1226 bajo el reinado de Fernando III el Santo y las últimas aportaciones góticas se dieron en el siglo XV cuando en 1493 se cerraron las bóvedas de los pies de la nave central, en tiempos de los Reyes Católicos. Está construida con piedra blanca de Olihuelas (en el término de Olías deReyl  
 

Durante muchos años, la tradición popular no escrita ha venido contando que hubo en este mismo lugar donde se encuentra la actual catedral un primer templo de la época del primer obispo Eugenio. Este templo fue consagrado por segunda vez el año 587, después de haber sufrido algunas alteraciones, como lo atestigua la inscripción aparecida en el siglo XVI que se conserva en el claustro y dice:
 
En el nombre del Señor fue consagrada la Iglesia de Santa María en católico, el día primero de los idus de abril, en el año felizmente primero del reinado de nuestro gloriosísimo rey Flavio Recaredo, Era 625. La ciudad había sido sede obispal de la Hispania visigoda. Los numerosos Concilios de Toledo atestiguan su importante pasado eclesiástico. También la abjuración del arrianismo por parte de Recaredo había tenido en ella su lugar y tiempo. La invasión musulmana no eliminó de inmediato la impronta cristiana y el obispado se trasladó y quedó establecido en la iglesia de Santa María de Alfizén.

 
mezquita mayor de la ciudad de Toledo. Algunos investigadores apuntan que la sala de oración de la mezquita se corresponde con el cuerpo de las cinco naves de la actual catedral: el sahn (o patio) coincidiría con una parte del actual Se cree que el edificio obispal visigodo fue trasformado nuevamente para convertirse en la claustro y de la capilla de San Pedro y el alminar con la torre de campanas. Entre los datos arqueológicos actuales es posible observar algunos vestigios de la construcción musulmana: una columna islámica empotrada dentro de la capilla de Santa Lucía; los fustes marmóreos que guarnecen el exterior del coro son un aprovechamiento de una antigua construcción musulmana; los arcos entrecruzados de estilo califal en el triforio de la capilla mayor y en el de la girola, coinciden con la tradición constructora musulmana de Córdoba, si bien evidentemente su estructura es de traza cristiana.

 
El edificio de la catedral tal y como hoy se contempla es obra del siglo XIII, época del arzobispo de Toledo Rodrigo Ximénez de Rada y del rey Fernando III el Santo. La ceremonia oficial de la puesta de la primera piedra se retrasó con respecto al comienzo de las obras, en espera de que el rey pudiera hacer acto de presencia (1227). Ximénez de Rada había sido elegido arzobispo de Toledo en 1209 y desde el principio de su mandato defendió ante el Papa la primacía de la sede toledana. En su mente estaba la construcción de una gran catedral digna de esta ciudad que él gobernaba. Por entonces, la mezquita-catedral se mostraba bastante vieja y ruinosa; incluso algunas secciones habían sido demolidas por su antecesor. La mezquita-catedral disponía de un amplio espacio, pero era de poca altura y le faltaba la esbeltez de otros templos de similar importancia. Ximénez de Rada fue el entusiasta promotor de la nueva catedral que se edificaría al gusto de la época, en estilo gótico. Tan entusiasta fue con el proyecto y tanto se involucró en él, que se llegó a decir que fue el autor-arquitecto de las trazas de la nueva catedral; afirmación totalmente fuera de lugar según los historiadores y arquitectos. El arzobispo pasó unos años manteniendo y reforzando el antiguo templo a la espera de que su sueño fuera realizado.











ERMITA DE LA VIRGEN DEL VALLE









El primero de mayo se celebra en Toledo la Romería de la Virgen del Valle. Según cuenta la tradición cuando la Virgen es paseada por los cerros


 










 
a la entrada de Toledo la gente corre hasta la ermita construida en torno al siglo XVII con el propósito de tocar las campanas.
 
 
Aquellos que no la alcancen no lograran llegar al matrimonio. Todos los años el 1 de mayo se realiza esta fiesta popular en un clima verdaderamente emocional.

 
Los devotos de la Virgen del Valle preparan la procesión que está compuesta por dos momentos fundamentales.
 El primero, al cual nos referimos anteriormente consiste en esa superstición que se funda en una creencia antiquísima, mientras que en la
 
segunda etapa, una vez realizada “toca de campana”, los participantes de la romería se conducen hacia “la piedra del rey moro” donde tiene lugar la tradicional merienda.

El Monasterio de San Juan de los Reyes
, en Toledo (Castilla-La Mancha, España), de la Orden Franciscana, fue construido bajo el patrocinio de la reina Isabel I de Castilla con la intención de convertirlo en mausoleo real, en conmemoración de la batalla de Toro y del nacimiento del príncipe Juan. Es una de las más valiosas muestras del estilo gótico isabelino en España y el edificio más importante erigido por los Reyes Católicos. El monasterio es, además, un monumento conmemorativo de los logros de los Reyes Católicos y de su programa político.
 
Fue construidopara la Orden Franciscana por encargo de los Reyes Católicos al arquitecto Juan Guas, como conmemoración de su victoria en la Batalla de Toro (1476).

El principal ideal fue hacer un panteón real en Castillo al igual que en San Isidoro de León. Se le encarga la idea a Juan Guas, participando en la decoración Egas Cueman, decorando el claustro y parte de la iglesia. Los Reyes Católicos crearán un estilo propio, planta alzado y decoración novedosas y estilosas.

En 1926 fue declarado Monumento Histórico-Artístico de interés nacional

Tan solo posee una nave. El módulo arquitectónico es muy largo y estrecho. El crucero es mucho mayor que la cabecera, muy marado en planta. La nave está separada en tramos. Entre los contrafuertes se establecen capillas laterales en línea con los brazos del transepto excesivamente estrechos.
Tiene capillas abiertas con unos arcos en la nave, pero no entre sí, retomado del gótico valenciano, esto se volverá a hacer en el barroco. Estas capillas se construyen por una solución pragmática, ya que permiten ritos simultáneos sin interferirse
Tiene dos portadas, la del oeste y la del norte porque es un sitio principal, es una zona elevada, se crea una plazoleta para romper el hacinamiento urbanístico medieval. La puerta lateral tiene importancia. Son los primeros preceptos urbanísticos del Quattrocento

Destaca el crucero, si lo dividimos en cuatro cuadrados se ve que la cabecera tiene dos cuadrados, a las naves dos prolongados. Siguiendo este modelo se hace todo el edificio. El crucero es excesivamente grande. El espacio está perfectamente jerarquizado, zona dedicada a la corona (con verja) separada del pueblo.

En el espacio para la muerte se da el discurso dialéctico necesario, pasamos del cuadrado (tierra) al octógono (círculos, celeste). Los templos circulares están dedicados a las vírgenes, el fuego, héroes, agua y a la muerte en el mundo clásico. Concepto de eternitas, serpiente que se muerde la cola, ni principio ni fin. Rotonda martirium que es igual al concepto de eternitas.
El claustro está unido a la iglesia pero diferenciado. Su puerta principal entre contrafuertes. Los cuadrantes del crucero se siguen como esquema en el claustro que es un elemento dinamizador.
El cimborrio es la metáfora arquitectónica de la corona, es sostenido por impresionantes trompas que marcan el sentido octogonal del cimborrio.

Profusa decoración de tracerías, la nervadura cae sobre ménsulas decoradas con angelitos (típico de flamenco). Lo novedoso es que utilizan un repertorio decorativo a la italiana, enlazando con la tradición humanista.

Destaca la decoración de fileteras (esculturas en madera o piedra que se ponían sobre las claves de la bóveda). Siguen una tradición italiana, retoma la jeroglífica. Aparece el emblema de los Reyes Católicos (águila de San Juan) con la I y la F además representados por el yugo y las flechas y el lema "tanto monta".

Techo de madera mudéjar.
La luz aún tiene ecos del mundo gótico. Se retira ese concepto de Jerusalén celestial. Modulo arquitectónico estrecho y alto. Especie de tribuna recorre el edificio. Frente la austeridad decorativa del gótico vemos excelentes tracerías muy naturalistas, con figuras zoomorfas y antropomorfas. Proliferación de imágenes sobre peanas y doseletes. Impresionante vidriera sobre cada capilla retomando el sentido albertiano de la luz. El cristal es translucido, luz natural, emanada directamente.

Aún estructura gótica (pilar con baquetones y decoración de tracería). Según ascendemos encontramos elementos clásicos (decoración de gotas) y un pesado entablamento recorre el edificio con una epigrafía que exalta el poder monárquico. Para elevar esas bóvedas se doblan los pilares donde descansan los terceletes, decoración mocárabe y de cabeceras, muy flamenca que luego vemos en Enrique Egás. Decoración que raya el horror vacui en el transepto.

El primer cuerpo tiene un arco carpanel que une con el claustro, glabete de arco mixtilíneo con profusa decoración que alberga el escudo franciscano. Arcos ciegos doblados con tracerías y miniaturas, otro cuerpo con santos sobre peanas y el emblema de los Reyes Católicos multiplicado hasta el infinito. A los pies del emblema aparecen los leones, símbolo de la monarquía y de Dios, y el verdadero jeroglífico (yugo y flechas junto al lema "tanto monta".

Al exterior los contrafuertes separan las capillas. Los pináculos aún son goticistas. Existe una crestería. Decoración con las denominadas bolas isabelinas en el exterior. La portada lateral es la principal.
 Marcado el transepto al exterior aunque no sobresale en planta. Aparece el escudo de los Reyes Católicos en los ábsides y contrafuertes de la portada. Hay cadenas que penden del crucero, sentido emblemático, representando las cadenas de los cristianos cautivos que fueron liberados cuando Fernando el Católico reconquistó Málaga y Baeza.
 Relieves con los blasones de los Reyes Católicos.

La portada del claustro tiene un arco carpanel de tres centros, rica decoración vegetal mezclada con decoración naturalista antropomorfa y zoomorfa. Exaltación bajo el arco mixtilíneo de la religión.
 
 El claustro tiene el mismo modelo que la iglesia (cuadrado del crucero). Equivalencia espacial, espacio exterior e interior. El claustro es el paraíso recobrado, precepto del ora et labora, dividido en cuatro partes que desemboca en un pozo símbolo de la vida. Tiene dos cuerpos y cuatro bandas.
El primer cuerpo tiene un arco apuntado con decoración de tradición de burbuja propia de finales del gótico. Pilares decorados con pináculos. El segundo cuerpo es más ligero con arco mixtilíneo que soporta la crestería gótica del edificio. La barandilla superior ya es  renacentista pero de tipo gótico. Decoración calada representación hagiográfica sobre peanas y decoración zoomorfa y antropomorfa.
Bóvedas nervadas se rompe el tercelete más complicado pero sigue siendo gótico. El segundo cuerpo utiliza la tradición mudéjar. Cubierta de madera a par y nudillo, decoración con estrellas de ocho picos. Arcos carpaneles con la leyenda de tanto monta y el león sustentan la bóveda.



SINAGOGA DE TOLEDo
Santa María la Blanca es un templo católico que está ubicado en la ciudad española de Toledo. Construida en el siglo XII como sinagoga, después de los pogromos del siglo XIV acabó transformada en una iglesia

 En la actualidad el edificio pertenece a la Iglesia Católica, pero no se realiza culto en él. Se encuentra abierto al público y funciona como museo. 
 
Arquitectura .Construido en 1180 (según testimonia la inscripción visible en una de sus vigas), este edificio mudéjar posee cinco naves separadas por pilares sobre los que descansan arcos de

 
herradura. Si bien existe cierto contraste entre la sobriedad del exterior de la sinagoga y su elaborado interior, el edificio presenta no poca austeridad.
 
 Conforme a la tradición oriental, el mismo 'vive' hacia el interior. Esta sinagoga tuvo considerable influencia sobre otras sinagogas españolas; tal es el caso, por ejemplo, de la sinagoga de Segovia.
 
Estilo
Se trata de una construcción mudéjar, creada por canteros moros. Sus elementos de arquitectura incluyen paredes blancas y lisas, hechas de ladrillo, arcos de herradura y pilares octogonales, decoración geométrica en los frisos y vegetal en los capiteles de los pilares.
 
Todas estas características y la distribución de los espacios, con sus naves formadas por la sucesión de arcos de herradura soportados por pilares, tienden a recordar la tipología propia de una mezquita.
  No obstante, en el siglo XIX, la articulación interior y estilo morisco de Santa María la Blanca han servido de modelo para importantes sinagogas europeas y americanas
 Los 32 pilares de este templo son de ladrillo recubierto por cemento y cal. Ornados de piñas y volutas, sus capiteles denotan influencia del arte románico
 
Por encima de los arcos de herradura prevalece la ornamentación abstracta en frisos horizontales que incluye molduras con delicados motivos basados en la interacción de líneas y medallones. Los entrelazados geométricos formados por las líneas son de origen almohade
 
Historia
En 1260, la comunidad judía de Toledo obtuvo un permiso extraordinario del rey Alfonso X para reconstruir "la mayor y más hermosa sinagoga de España", siendo esto opuesto a una bula del papa Inocencio IV.
 
 El edificio fue erigido en territorio cristiano (Reino de Castilla) por constructores moros y tuvo como comitente y financista a la comunidad judía de Toledo, representada por don Yosef ben Shoshan.
 
 Una vez acabado, el edificio fue denominado "Sinagoga Mayor" pues era el principal centro de culto hebreo en Toledo. Ya desde sus inicios, ese templo formaba parte de las diez sinagogas toledanas consideras por Yehuda ben Shlomo al-Jarizi en sus escritos del siglo XII
 Durante años los hebreos acudieron a la Sinagoga Mayor para orar y estudiar la Biblia, mas esto fue interrumpido por el asalto al barrio judío en 1355 y matanzas en 1391, ocasionados por los incendiarios discursos de Ferrán Martínez, Arcediano de Écija
 
En el contexto de la campaña de predicación de San Vicente Ferrer el edificio fue convertido en iglesia de la Orden de Calatrava bajo la advocación de la Virgen en 1411 y, desde entonces, se lo denominó "Iglesia de Santa María la Blanca".
 
En 1550, el cardenal Siliceo la transformó en un beaterio para mujeres públicas arrepentidas. De entonces data el retablo de la escuela de Berruguete, obra de Juan Bautista Vázquez el Viejo y Nicolás Vergara el Viejo.
 
 Las transformaciones en la cabecera del edificio son de esta época y estuvieron a cargo del arquitecto Alonso de Covarrubias.
 
Entre 1600 y 1701 el edificio permaneció desocupado. Durante el siglo XVIII fue cuartel de las tropas de la guarnición de Toledo. Con la invasión napoleónica de principios del siglo XIX fue convertido en depósito.
 A mediados del mismo siglo se lo declaró monumento nacional y, tras la guerra civil española, un real decreto del gobierno lo cedió a la Iglesia Católica.
 
Con todo, no es para nada inusual referirse a dicho edificio como la "Sinagoga de Santa María la Blanca".

 
Estación de Toledo.
La estación de Toledo es una estación ferroviaria española de carácter terminal situada en la ciudad de Toledo en Castilla-La

Mancha. Inaugurada en 1919 y restaurada en 2005 destaca por su estilo neo mudéjar. Declarada Bien de Interés Cultural, está
 
catalogada como monumento desde el 21 de noviembre de 1991. En 2010, recibió cerca de un millón y medio de pasajeros.

El puente de Alcántara 
El puente de Alcántara  y puente del mismo nombre, se levanta sobre el río Tajo, en la ciudad de Toledo (España). Situado a los pies del castillo de San Servando, se tiene constancia de su construcción en la época romana, en la fundación de Toletum. Era uno de los puentes que daba entrada a la ciudad y era en el Medioevo entrada obligada para todo peregrino.
Está fuertemente protegido con dos puertas fortificadas en sus extremos, siendo una de ellas de estilo barroco y otra construida en época medieval. Este puente ha sido objeto de constantes ataques en el periodo de la Reconquista, y vuelto a reconstruir.
Fue declarado monumento nacional en 1921.




La Puerta de Bisagra .
O Puerta Nueva de Bisagra, conocida con este nombre debido a que hay otra de menor tamaño cerca: La Puerta Antigua de Bisagra o Puerta de Alfonso VI, es una puerta monumental situada en las murallas de Toledo, Castilla-La Mancha, España



La Puerta del Cambrón.
 Es una entrada de origen musulmán situada en el oeste de la ciudad de Toledo, acceso desde esta parte a través de la muralla. Su nombre deriva de las plantas espinosas, cambroneras, que crecían en este lugar.